LAS MUJERES DE LOS INFIELES
He tenido más de un caso en que la nueva pareja del esposo tiene un rol protagónico, y no por el adulterio, sino porque una vez detectada la causa del divorcio que vamos a invocar a favor del esposo infiel, la referida “nueva conquista” asume el rol de vengadora y exige la inclusión de ciertos reclamos, que lejos de hacer el caso más sencillo, lo convierte en una lucha de poderes entre las mujeres del cliente.
La causa más común de un divorcio de un adúltero, no es su propio pecado, ya que este no puede reclamar un divorcio basado en su propia infidelidad, sino- por ejemplo- la separación de hecho, es decir probar que ambos hacen vida por separado.
Sin embargo, a pesar que puede ser un proceso en el que solo haya que probar un hecho, muchas veces la nueva pareja exige que le reduzcan las pensiones a los hijos menores (lo que es casi imposible), que las visitas a los niños no sea en casa de la ex, que se indique que la culpa del fracaso matrimonial fue de la ex, que diga cuánto gana la ex, que se exija a que la ex acepte el divorcio, etc.
Tuve más de un caso, en la que era la nueva pareja traía los escritos con lo que debía presentarse al Juez. No está mal que la nueva pareja se preocupe, pero si está mal que ella decida como debe procederse con su antecesora, y menos aún que tome las decisiones.
Hubo divorcios que se arruinaron debido a la injerencia de la nueva pareja, y los reclamos fuera de tono de ella avivaron los ánimos de la otra parte.
Le recomiendo escuche a su pareja, pero sea usted quien decida la estrategia con su abogado.
EL DIVORCIO RÁPIDO DE ALGUNOS NOTARIOS TIMORATOS
Existe una Notario en el corazón de Lima, que tiene una de las mejores tarifas del mercado, pero su tímidez de violentar leyes prácticamente anula su gestión y los divorcios rápidos terminan en divorcios tortugas.
Es bueno tomar precauciones, y tratar de evitar sanciones, pero de ahí a interpretar la ley de manera distinta a la que fue aprobada por el congreso, no es pensar en el servicio público al cual se debe el Notario.
Esta Notaria de la Plaza San Martín, dice que los 60 días, que la ley estipula luego de la primera audiencia, se cuentan de lunes a viernes (días hábiles) sin contar sábados o domingos o feriados, esta interpretación resulta burócrata… la propia norma señala los plazos en días son naturales, no días hábiles, así solo logra un innecesario alargamiento del proceso.
Pero ahí no queda la cosa, completado su “propio plazo”, convoca a una segunda audiencia, la que tampoco está en la ley, con fecha y hora de asistencia obligatoria… la norma solo indica que vencido el plazo cualquiera de los cónyugues solicitará la disolución, es decir es un acto de mero trámite.Y si usted no asiste a algunas de esta audiencias, el caso se archiva… la norma señala, en caso de inconcurrencia se convoca a una segunda sesión.
Esta infeliz interpretación de la norma, hace que el divorcio rápido termine en un divorcio tortuga, siendo el caso, que un divorcio en este despacho notarial puede tomar de 5 a 6 meses, cuando los notarios que sí conocen la nueva ley lo ejecutan en 10 semanas ( 2 meses y medio).